EL ORO LES QUEDA CHICO
Ana Gallay y Georgina Klug estrenan su título de campeonas panamericanas. Escribieron su propia historia en Canadá, pero además dejaron su huella en el deporte argentino, logrando por primera vez la medalla dorada en un Juego Panamericano para las mujeres.
Las rivales por el oro, las cubanas Linama Flores y Leila Martínez, habían superado a las argentinas en la fase de grupos. Esta vez, el gran festejo fue para la dupla nacional con un 2-1 (21-17, 19–21 y 15-7). El «Dale campeón, dale campeón» se escuchó a todo pulmón en el estadio canadiense e hizo emocionar a todos, incluso aquellos extranjeros que se acercaron a ver la definición.
En el recorrido hacia el escalón más alto del podio la santafesina y la entrerriana se llevaron el triunfo en el debut en sets corridos (21-11 y 21-13) ante Ayana Dyette y Malika Davidson de Trinidad y Tobago.
Por la segunda fecha del grupo D, no pudieron vencer a la dupla cubana con la cual volverían a cruzarse en la final. La derrota fue por 2-1 con parciales de 21-19, 15-21 y 13-15.
En el último encuentro de la fase de grupos las argentinas derrotaron a México por 2-0 (21-15, 21-10) y se ganaron el pase a los playoff.
Allí se encontraron con las chilenas Pilar Mardones y Francisca Rivas e impusieron su superioridad con un 2-0 (21-9 y 21-10) en el partido de clasificación que determinó los cruces de cuartos de final de la competencia panamericana .
En los cuartos se midieron ante las norteamericanas Kelly Larsen y Betsi Metter y fue victoria para la dupla nacional por 21-18 y 21-12. El sueño de la medalla comenzaba a hacerse realidad.
La semifinal fue un partido no apto para cardíacos. Las argentinas superaron a la dupla brasilera por 2-1 y festejaron como si ya hubiesen ganado el oro. Fue un gran desahogo, que les dio la confianza suficiente para llegar a la final con la esperanza de la consagración.
Una vez subidas al podio, las argentinas, quienes participaron juntas por primera vez en un Juego Panamericano, nos regalaron un momento emocionante, el de oír el himno argentino y ver a nuestra bandera flamear en lo más alto. Campeonas Panamericanas, símbolo de garra partido a partido y artífices de un hecho histórico para el Beach Volley argentino.
Por el lado de los varones, Ian Mehamed y Nicolás Capogrosso perdieron 2-0 (11-21, 18-21) frente a Uruguay, y se ubicaron en el 6° puesto de la competencia.